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La ingeniería civil española ha tenido, a lo largo de toda su historia, una fuerte vocación exportadora que, basada en la excelente reputación de sus empresas y profesionales, es correspondida con la confianza otorgada por clientes públicos y privados a lo largo de todo el mundo.

A pesar de su actual repercusión mediática, la internalización de la ingeniería civil española es un proceso que, con altibajos, acumula ya medio siglo de vida. A finales de los años 60 las principales constructoras españolas aprovechaban el crecimiento experimentado durante el Desarrollismo y el conocimiento adquirido en los proyectos de inversión norteamericana para abrirse a otras áreas geográficas, en cuya elección pesaban tanto la proximidad geográfica y/ o cultural como el interés de acción exterior del Estado: Hispanoamérica y el mundo árabe.

En las mismas fechas surgían las que hoy son principales firmas de ingeniería, bien como servicios técnicos asociados a las empresas constructoras, bien como empresas independientes. En ambos casos la actividad exportadora constituyó, desde el principio, uno de los principales campos de actuación.

En la presente década la grave crisis que han sufrido todos los actores de la ingeniería civil española y la fuerte contracción de la inversión pública en España ha motivado que el sector se haya visto obligado a centrar su actividad en el ámbito exterior, aportando la capacidad técnica y de gestión acumulada en el desarrollo de grandes proyectos de infraestructura realizados tanto en España como en el extranjero.

Asimismo, los procesos de fusión y concentración han incrementado de manera notable la capacidad financiera de las empresas lo que ha permitido convertir a España en uno de los líderes mundiales en concesiones de un amplio rango de infraestructuras: viarias, aeroportuarias, de tratamiento y distribución de aguas, hospitalarias…

El sector de la construcción en España se encuentra hoy volcado a la actividad exterior, donde se concentra el grueso de su contratación, tanto en nuestro ámbito más cercano como en lugares tan lejanos como Oceanía. Esta política de actuación exterior es replicada por las principales empresas de ingeniería civil, presentes en una amplia variedad de entornos geográficos.

En esta jornada hemos intentado reunir a un buen número de expertos que han desarrollado gran parte de su carrera profesional en el proyecto, construcción y gestión de infraestructuras en el extranjero. Nuestra idea ha sido presentar experiencias de grandes desarrollos que abarcan todos los ámbitos en los que la ingeniería civil española está presente en el exterior y a través de las cuales se pueden exponer las oportunidades y dificultades que supone trabajar en otros ámbitos geográfica y culturalmente diferentes al español.

Esperamos que esta jornada logre el objetivo de dar visibilidad a los grandes profesionales que desarrollan su actividad fuera de nuestras fronteras, al tiempo que permita a la comunidad técnica compartir parte de la valiosísima experiencia que estos profesionales atesoran.